Fisioterapia y salud mental
La salud no es la ausencia de dolor o enfermedad. Es mucho más que esto. Se trata del equilibrio entre cuerpo y mente. Y en ese camino hacia el bienestar completo, la fisioterapia es una gran aliada.
Cuando nos sentimos bien a nivel físico, y nuestro cuerpo es funcional, también nos sentimos bien a nivel emocional. Todo está conectado, seguro que cuando tienes dolores o molestias físicas, tu estado de ánimo no es el mejor.
Vamos a ver cómo la fisioterapia te puede ayudar a reducir el estrés, a aliviar la ansiedad, y a reconectar con tu cuerpo desde el cuidado y la calma.
Cómo la fisioterapia puede tener un impacto positivo en la salud mental
Cuerpo y mente. Una conexión que la fisioterapia también cuida.
Aunque solemos acudir al fisioterapeuta por dolores físicos, contracturas o molestias articulares, lo cierto es que muchas veces el origen (o al menos una parte) está en nuestro estado emocional. El estrés, la ansiedad o incluso una época de mucho cansancio dejan huella en el cuerpo.
La buena noticia es que también funciona al revés. Cuando tratamos el cuerpo con fisioterapia, también podemos mejorar cómo nos sentimos a nivel emocional. Relajar la musculatura, respirar mejor, liberar tensiones o algo tan simple pero tan eficaz como tener un momento para uno mismo, marca un antes y un después en cómo te sientes.
Fisioterapia para reducir el estrés, la ansiedad y mejorar el bienestar general
El ritmo del día a día es frenético. O casi el de todos los días.
El cansancio que se acumula, las preocupaciones diarias y las tensiones emocionales inundan en nuestro cuerpo sin que muchas veces seamos del todo conscientes. Dolores musculares, rigidez, fatiga o incluso problemas digestivos pueden ser síntomas de que algo no va bien.
Aquí es donde entra la fisioterapia. A través de tratamientos personalizados y técnicas manuales, en ZENIT FISIOTERAPIA Y SALUD conseguimos liberar esa tensión acumulada, favorecer la relajación y ayudar a que el cuerpo recupere su equilibrio natural. Y cuando el cuerpo se relaja, la mente también lo hace.
¿Cómo ayuda la fisioterapia en la salud mental?
La fisioterapia también aporta numerosos beneficios a nivel emocional y mental, como por ejemplo:
- Reducción del cortisol: el cortisol es una hormona que produce nuestro cuerpo en situaciones de estrés, y aunque es útil en momentos puntuales, niveles elevados de forma constante pueden afectar al bienestar físico y emocional. Las técnicas de masaje y relajación pueden reducir dichos niveles de esta hormona.
- Estimulación de endorfinas: el ejercicio terapéutico y el movimiento promueven la liberación de endorfinas, neurotransmisores que generan sensación de bienestar.
- Mejora del sueño: muchas personas con problemas de ansiedad o estrés también presentan dificultades para dormir. Con una buena rutina de fisioterapia, el cuerpo se regula y se consigue un descanso más reparador.
- Sensación de control y autocuidado: asistir a fisioterapia, cuidar de nuestro cuerpo y sentir mejoras reales nos ayuda a recuperar el control sobre nuestra salud y a reforzar la autoestima.
Técnicas que utilizamos en Zenit para trabajar el bienestar emocional
En nuestra clínica de fisioterapia en Zaragoza, nos enfocamos en cada paciente de forma integral. Estas son solo algunas de las técnicas que aplicamos cuando tratamos a personas con ansiedad, estrés o simplemente necesidad de parar y cuidarse:
- Masaje relajante: la masoterapia es uno de los tratamientos más efectivos para reducir la tensión muscular y calmar el sistema nervioso. Se trata de un masaje suave, profundo y personalizado que actúa sobre puntos de estrés acumulado.
- Terapia miofascial: ayuda a liberar las restricciones en la fascia (tejido conectivo que envuelve músculos y órganos) y mejorar la movilidad general del cuerpo, reduciendo también sensaciones de opresión emocional.
- Ejercicio terapéutico guiado: el movimiento consciente, adaptado al nivel de cada persona, ayuda no solo a fortalecer el cuerpo, sino a despejar la mente y mejorar el estado de ánimo.
- Respiración y conciencia corporal: a través de ejercicios específicos, enseñamos a respirar de forma más eficiente, lo que favorece la relajación, reduce la ansiedad y mejora la conexión cuerpo-mente.
¿Y si no tengo ninguna lesión física?
¡No pasa nada! La fisioterapia también es una herramienta preventiva. No hace falta tener dolor para acudir a un fisioterapeuta. Muchas personas vienen a nuestras sesiones simplemente para mejorar su postura, relajar tensiones o aprender a cuidar mejor de su cuerpo.
Además, es frecuente que quienes sufren de ansiedad presenten molestias físicas como:
- Dolor en la zona cervical y hombros.
- Tensión mandibular (bruxismo).
- Molestias en la espalda o en la zona lumbar.
- Dolores de cabeza tensionales.
- Sensación de fatiga constante.
Fisioterapia y salud mental: una relación cada vez más reconocida
Cada vez más estudios científicos reconocen los beneficios de la fisioterapia en el bienestar emocional. Centros de salud mental, clínicas integrales y programas de rehabilitación incluyen fisioterapeutas dentro de sus equipos porque entienden que el cuerpo y la mente no funcionan por separado.
Y por supuesto desde ZENIT FISIOTERAPIA Y SALUD, contamos con la colaboración de un equipo de psicólogos al que podemos derivar a nuestros pacientes si así se necesita.